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OPINIÓN


















                                      Greta Thunberg y la crisis medioambiental:
                                      ¿cómo enfrentar el cambio climático hoy?

                                                   Por David Carrillo Contreras
                                                     Profesor Emérito PUCV
                           Las noticias que nos han invadido en los últimos meses, ligadas al ámbito del calentamiento
                           global de nuestro planeta, nos hacen sentir que “la creación, literalmente, gime y sufre dolores
                           de parto” (Romanos 8:22) y la activista Greta Thunberg, como un ángel enviado por Dios ha
                           denunciado los riesgos a los que estamos sometidos y sus consecuencias que ya se comienzan
                           a sentir con dramatismo.

                           Sueca de nacimiento, con tan sólo 18 años, Greta ha estado y sigue presente en los medios
                           de comunicación internacionales constituyendo  un fenómeno  inédito que comenzó a
                           visibilizarse desde que tenía 13. La fuerza, profundidad, dramatismo y valentía para expresar
                           sus ideas remecieron a toda la humanidad y le han permitido estar vigente en los grandes
                           escenarios del mundo.

                           Greta ha responsabilizado en su discurso emitido ante la Conferencia Juvenil sobre el Clima de
                           la ONU, a los líderes políticos del mundo de ofrecer promesas vacías que no son seguidas por
                           acciones concretas. Podría decirse que puso en jaque a los líderes mundiales al exigirles medidas
                           concretas que permitieran devolver las esperanzas de la humanidad en recuperar en el mediano y
                           largo plazo un planeta amenazado por fenómenos cuyas causas han sido definidas por la ciencia.

                           La COP26 celebrada en Glasgow (Escocia) culminó en noviembre pasado. Después de la
                           denuncia el mundo espera las acciones a seguir. Concretamente, entre las demandas que
                           plantearon los grupos ambientalistas a la ONU destacan las siguientes: frenar el aumento
                           de la temperatura de la atmósfera en es 1,5°C respecto del nivel pre-industrial, revertir
                           la desforestación en dos países emblemáticos para el año 2030, iniciar un proceso de
                           descarbonización de las centrales ligadas a la producción de electricidad, controlar la emisión
                           de metano (gas natural) cuya acción es 20 veces más potente que el dióxido de carbono y
                           sustituir los combustibles fósiles por electricidad de origen no-convencional, entre otros
                           objetivos. Pero no basta con definir las tareas que cada país se comprometa a desarrollar, cada
                           nación tendrá explicar cómo y en qué horizonte de tiempo ese compromiso se alcanzará.

                           Argentina y Brasil, dos grandes países deforestadores de la Región, que habían propuesto
                           como meta el año 2014, ampliaron el plazo al 2030. Asimismo, si el término de la carbono-
                           neutralidad se fijara para el año 2050, China lo haría en 2060 e India en 2070.

                           Los adultos mayores de hoy no tendrán la oportunidad de reencontrarse con el planeta
                           “saludable” que les vio nacer, crecer y desarrollarse sin angustias, tampoco podrán vivir en un
                           planeta que ha recuperado la mayor parte de sus glaciares, sus lluvias benignas no destructivas
                           con lagos que muestren sus aguas llenas de vida acuática, con sus ríos transformados en arterias
                           que vivifiquen sus tierras aledañas, en fin, que mantengan equilibradamente su flora y fauna.

                           Los adultos mayores no lo veremos, sí nuestros nietos y, con toda seguridad, nuestros
                           bisnietos. La COP 26 finalizó con el compromiso de alcanzar la carbono-neutralidad por parte
                           de Australia, Rusia, Arabia Saudita, Brasil e India, aunque este último país se comprometió
                           a que sus emisiones netas sean cero recién en 2070. Aunque la puesta en marcha de esta
                           titánica tarea será sostenida a lo largo del tiempo, existe la convicción que la humanidad será
                           capaz de salvar al planeta no sin sacrificios, pero sí con mucha generosidad.



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